Nombre: Cusco Reign Of Fire
Tipo de Rol: Foro.
Temática:
"Escucha bien esta historia, pequeño, porque puede que sea la última vez que la oigas, y no podrás encontrarla en ningún libro, texto o manuscrito.
Tú naciste bajo el yugo de los dragones, pero hubo un tiempo ya lejano en el que estos seres no existían. Cuentos de hadas, mitos, objeto de fantasía... Muchos eran los calificativos que se atribuían a ellos, y en los que verdaderamente nadie creía. Los libros hablaban de sus leyendas, de sus combates mágicos contra los humanos, de sus ancestrales tesoros siempre custodiados por su ígneo aliento...
Desgraciadamente, nuestros antepasados comprobaron que esos seres, los dragones, no eran leyenda, ni magia, ni fantasía: Eran muy reales. Lo que te estoy contando se ha transmitido de generación en generación, pero se dice que en el Año Cero, los dragones Despertaron de un profundo letargo en las profundidades de la Tierra. Por aquel entonces éramos poderosos, nos amparaba una magia diferente, real, construida mediante nuestro esfuerzo y nuestra inteligencia.
Sin embargo, nada podía parar al fuego. Inundaban el cielo, ocultando las estrellas bajo sus formas. Clamaban venganza y calcinaban todo a su paso, convirtiendo nuestro hogar en una piedra negra y humeante. Les combatimos, pero toda resistencia fue inútil. Hoy casi nadie recuerda esos tiempos, pequeño, temerosos de ser escuchados y castigados. Pero te contaré algo más: nunca quisieron exterminarnos. Muchos murieron, pero los planes de nuestra Reina siempre fueron diferentes...
Apareció la bandera blanca, y con ella, comenzó nuestra esclavitud. Los seres que ahora nos gobiernan empezaron a someternos con mano de hierro, obligándonos a reconstruir una sociedad y unas infraestructuras a su medida. Uno de los frutos es el suelo que estás pisando en estos momentos: Talos en sí misma. Los siglos pasaron, y el periodo de esclavitud total empezó a deformarse hacia un gobierno, una monarquía con una única figura de poder, que es lo que tú conoces: Ella manda sobre nosotros, nos permite vivir, reproducirnos, crecer, cultivar y ejercer como seres humanos.
Pero nunca olvides quién eres, porque debajo de tus pies, a metros de profundidad, hay gente que recuerda lo que una vez fuimos...
Los dueños de este mundo."
"Escucha bien esta historia, pequeño, porque puede que sea la última vez que la oigas, y no podrás encontrarla en ningún libro, texto o manuscrito.
Tú naciste bajo el yugo de los dragones, pero hubo un tiempo ya lejano en el que estos seres no existían. Cuentos de hadas, mitos, objeto de fantasía... Muchos eran los calificativos que se atribuían a ellos, y en los que verdaderamente nadie creía. Los libros hablaban de sus leyendas, de sus combates mágicos contra los humanos, de sus ancestrales tesoros siempre custodiados por su ígneo aliento...
Desgraciadamente, nuestros antepasados comprobaron que esos seres, los dragones, no eran leyenda, ni magia, ni fantasía: Eran muy reales. Lo que te estoy contando se ha transmitido de generación en generación, pero se dice que en el Año Cero, los dragones Despertaron de un profundo letargo en las profundidades de la Tierra. Por aquel entonces éramos poderosos, nos amparaba una magia diferente, real, construida mediante nuestro esfuerzo y nuestra inteligencia.
Sin embargo, nada podía parar al fuego. Inundaban el cielo, ocultando las estrellas bajo sus formas. Clamaban venganza y calcinaban todo a su paso, convirtiendo nuestro hogar en una piedra negra y humeante. Les combatimos, pero toda resistencia fue inútil. Hoy casi nadie recuerda esos tiempos, pequeño, temerosos de ser escuchados y castigados. Pero te contaré algo más: nunca quisieron exterminarnos. Muchos murieron, pero los planes de nuestra Reina siempre fueron diferentes...
Apareció la bandera blanca, y con ella, comenzó nuestra esclavitud. Los seres que ahora nos gobiernan empezaron a someternos con mano de hierro, obligándonos a reconstruir una sociedad y unas infraestructuras a su medida. Uno de los frutos es el suelo que estás pisando en estos momentos: Talos en sí misma. Los siglos pasaron, y el periodo de esclavitud total empezó a deformarse hacia un gobierno, una monarquía con una única figura de poder, que es lo que tú conoces: Ella manda sobre nosotros, nos permite vivir, reproducirnos, crecer, cultivar y ejercer como seres humanos.
Pero nunca olvides quién eres, porque debajo de tus pies, a metros de profundidad, hay gente que recuerda lo que una vez fuimos...
Los dueños de este mundo."
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